MIRANDO DESDE EL JARDÍN

Jardín Botánico "Carlos Thays"

Ubicado en el Barrio de Palermo, en plena ciudad, este parque es uno de los más lindos que tiene Buenos Aires.

Sus casi ocho hectáreas y sus aproximadamente 7000 especies vegetales hacen de él un lugar único para visitar en cualquier momento del año ya que, cada estación, le otorga una belleza diferente.

Historia

Nació como "Jardín Botánico de Aclimatación" para complementar las actividades del Vivero Municipal y fue un proyecto del entonces Director General de Paseos Públicos de la Capital, el arquitecto y paisajista francés Don Carlos Thays.

Además de contener los ejemplares que, por razones de espacio, ya no podían ser albergados en el mencionado vivero, Don Thays consideraba que el paseo, dada su ubicación en las cercanías del Zoológico y el "Parque Tres de Febrero", resultaría interesante y educativo para la población.

Hacia 1892 comenzaron los trabajos que se prolongarían por seis años, hasta el 7 de Febrero de 1898, fecha en la que fue abierto al público.

Desde 1937, lleva el nombre de su fundador y, en 1996 fue declarado "Monumento Histórico Nacional" por su diseño, su historia y su valor patrimonial y cultural.

Interior

Diseñado aprovechando la topografía del terreno, en él se encuentran representados los principales estilos en el trazado de paisajes: simétrico, mixto y pintoresco recreados en tres jardines, a saber:

El Jardín Romano, con sus lineamientos característicos y sus especies provenientes de Italia: álamos, olmos, cipreses, laureles, rosales, etc.

El Jardín Francés con robles, fresnos, jazmines, madreselvas, etc., su diseño simétrico se corresponde con el de los jardines de la Francia de los siglos XVII y XVIII.

El Jardín Oriental, proyectado de acuerdo con la traza característica de esos espacios.

El Parque posee también seis sectores demarcados denominados "fitogeográficos": cinco reúnen especies representativas de cada continente y el sexto está especialmente dedicado a la flora autóctona.

Otra sector agrupa los ejemplares de acuerdo a la familia botánica a la que pertenecen.

El edificio central data del año 1881 y es una obra del ingeniero militar polaco Jordan Wysocky.
En estilo inglés, construida de ladrillos a la vista, esta bella y bien conservada casona de dos pisos fue, inicialmente, sede del "Departamento Nacional de Agricultura", luego del "Museo Histórico Nacional" y, a partir de 1897, de la "Dirección Nacional de Paseos".

Hoy está destinada a la administración del parque e integrada a la "Dirección de Espacios Verdes del Gobierno de la Ciudad".

Otro de los atractivos del Jardín Botánico reside en sus varios invernaderos.
Divididos en "fríos" y "calientes" contienen los espécimenes que requieren de un ambiente especial como, por ejemplo, las cactáceas.

De los cinco, el más importante es el "Invernadero Mayor", también llamado "Principal", que alberga especies tropicales y sub-tropicales.

Vivero Principal

Detalle

Premiado en la Exposición Universal de 1899, fue adquirido en París en 1900; está realizado en hierro y vidrio y tiene unos 35 mts de largo por 8 mts de ancho aproximadamente.

Maravilloso ejemplo del estilo constructivo y artístico de la época, el "Art-Nouveau", se lo considera uno de los pocos que existen en el mundo con estas características.

Vivero Secundario

Recorrer y adentrarse por los numerosos senderos y caminos que posee el Jardín permite, además del contacto con la naturaleza, disfrutar de las más de 30 obras ubicadas en él.

Esculturas y monumentos de famosos artistas nacionales y extranjeros como Lucio Correa Morales, Agustín Querol y Subirats, Ernesto Biondi o Leone Tomassi salen al paso de los caminantes.

A todo lo mencionado hay que agregarle un pequeño lago, dos fuentes, más de 10 estanques artificiales con plantas acuáticas y una huerta.
El Jardín también cuenta con una biblioteca especializa, un herbario, un Museo y una Escuela de Jardinería que depende de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires.

"Indicador Meteorológico"
Ing. José Marcovich

Curiosidades

* El edificio central fue habitado por Don Carlos Thays y su familia, durante los años que duró su gestión como Director General de Paseos. Una de las habitaciones exhibe algunos de sus elementos de trabajo.

* Tanto la Escuela de Jardinería "Cristobal M. Hicken" como la Biblioteca fueron creadas en 1912 por el sucesor de Don Thays, el ingeniero agrónomo Don Benito J. Carrasco.
Especializada en temas botánicos, cuenta con numerosos libros y publicaciones de libre acceso al público.

* La obra "Indicador Meteorológico" del Ing. José Marcovich data de 1911 y fue un regalo del Imperio Austro-Húngaro a la nación.
Realizada en mármol blanco está coronada por una esfera de bronce (que representa la bóveda celeste con las constelaciones zodiacales) que contiene en su interior otra (esta alude a la Tierra y a sus continentes).
Se completaba con una serie de instrumentos meteorológicos, ocho relojes de precisión que marcaban la hora de las principales capitales europeas y uno de sol, que han desaparecido con el tiempo.

* El "Herbario" es histórico.
Esta "Biblioteca Vegetal" es una de las más antiguas del país; entre sus especies cabe mencionar un ejemplar del año 1825, proveniente del Jardín Botánico de Sidney y otro de 1880 donado por el Jardín Botánico de Hungría.

"La Primavera"
Lucio Correa Morales

"Sagunto"
Agustín Querol y Subirats

"L´Acquaiolo"
Vincenzo Gemito

* Posee un "Jardín de los Sentidos" diseñado con especies aromáticas, odoríferas y texturadas, para oler y tocar. Se lo utiliza, en especial, para actividades con personas no-videntes o de capacidades diferentes.

* Dentro de su enorme variedad de espécimenes, se destacan de los provenientes de Europa, ejemplares de robles, cipreses, avellanos y olmos; de África, helechos, palmeras y gomeros, de Oceanía, acacias, casuarinas y eucaliptos, del Norte de América, las sequoias y de Asia, el Ginkgo-biloba o "Árbol de la Vida".

* Hacia 1986, durante una excavación, se encontraron restos de túneles y arquerías en la zona del Invernadero Principal. Los mismos pertenecían a un edificio desaparecido hacia 1900, el "Polvorín de Cueli", que se levantaba en el sitio y que fuera utilizado durante las Invasiones Inglesas.

* El Botánico también es famoso por sus felinos habitantes. Abandonados en cantidad por sus dueños, el jardín se transformó en hogar para estos animalitos.
En 1991, entre quejas y protestas, a favor y en contra, se decidió enviarlos a habitar la zona del Delta, aunque muchos sospecharon que, en realidad, fueron exterminados.
Pasado el tiempo, los gatos volvieron y hoy se los puede ver, de todos tamaños y colores, habitando pacíficamente el paisaje del que, ya, forman parte.